Periodista, escritor y académico, Luis Nitrihual Valdebenito trabaja hace 15 años en la Universidad de La Frontera, donde es profesor titular. Ha sido director de la Carrera de Periodismo, y actualmente es vicedecano de la Facultad de Educación, Ciencias Sociales y Humanidades (FECSH). Es también Doctor en Ciencias de la Información por la Universidad Complutense de Madrid, y ha vivido toda su vida en nuestra región. Conoce la Universidad y el territorio, y no elude las responsabilidades que le competen a uno y otro.
Con claridad y lucidez, Luis reconoce la vinculación de la Universidad con el territorio, relación que espera profundizar y fomentar. “Nuestra Universidad, y muy especialmente nuestra Facultad, aportan decisivamente en la formación de profesionales que se insertan en los territorios. Eso lo tenemos que dejar asentado de inmediato”, declara. “Somos una candidatura que, desde la responsabilidad universitaria, busca profundizar valores fundamentales como la equidad, el diálogo y respeto intercultural y los desafíos que representan la inclusión y diversidad”. Con esto, su candidatura parece estar situada no sólo en el espacio universitario, sino también desde una mirada de pertinencia territorial.
Otro de sus ejes es la defensa y promoción de la educación pública. Desde su formación primaria estudió en escuelas públicas, para luego continuar su pregrado en la Universidad de la Frontera, de donde se tituló como periodista. A sus 43 años, conoce bien el medio en el que está insertado. En sus palabras, “tendremos un enfoque universitario con especial acento en los desafíos de nuestro tiempo. Hay desafíos en materias de medioambiente, transformación digital, y por supuesto en equidad de género. ¿Quién podría sustraerse de estos grandes temas? Nosotros y nosotras no lo haremos, es parte de nuestra responsabilidad”.
Hasta este año se ha desempeñado como vicedecano de la FECSH, donde ha desarrollado su carrera. “Me reconozco en aquellas y aquellos que hacen de la Universidad una forma de vida y no solamente un trabajo”, señala, transparentando la importancia de la universidad en su día a día. Y es que ha dedicado gran parte de su vida a la academia, de ahí su preocupación por este espacio y su motivación para ser candidato. “Mi candidatura es la de un colega cercano y que puede conversar con todo el mundo sin importar estamento o condición contractual. Es importante la amabilidad en nuestro tiempo. Saludar con afecto, compartir una buena conversación, un café y una sonrisa, en nuestro tiempo es un acto transformador”.
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